Nuestro ego nos hace creer que el tiempo va pasando, de pasado a futuro, que el pasado va quedando atrás.
Parece que hay evidencias de que el pasado no ha pasado. https://tomaselorriaga.com/2015/03/28/el-pasado-no-ha-pasado/
Es mi presente quien hurga en el viejo baúl del pasado. También es el presente el que se va al futuro y se desespera. Porque vivimos en el eterno presente. El pasado es el presente pasado.
“Haz de tu pasado tu presente”. La recomendación de vivir en el presente parece acertada. Ciertos estados de relajación o mindfullness pueden ayudarnos. ¿Y cuando dejamos de meditar?
Estamos de acuerdo que “no debemos arruinar nuestro presente por un pasado… que no tiene futuro.” Mentalmente nos parece lógico y podemos compartirlo. Sin embargo emocionalmente es mucho más difícil de lograr ya que el pasado es especialmente intenso en emociones.
Decía Séneca que “en 3 tiempos se divide la vida: en presente, pasado y futuro. El presente es brevísimo, el futuro dudoso y el pasado cierto.”
¿Por qué el pasado es cierto?
Quizá porque si es nuestra mente quien está en el futuro para a veces preocuparnos, el pasado está impreso emocionalmente en nuestro cuerpo y a veces nos encadena. Hay evidencias del pasado.
Es falso que el pasado no tiene futuro.-
El pasado no está muerto. Decimos que el pasado no tiene futuro… pero no parece totalmente cierto.
Si la ansiedad dicen, es el “exceso de futuro”, la depresión es el “exceso de pasado”. Algunas personas tristes, deprimidas o fóbicas están emocionalmente atadas al pasado.
Construimos el futuro usando la proyección del pasado y del presente. Nos olvidamos que el tiempo, en caso de existir, es circular.
Buda decía que “si quieres conocer el pasado, mira tu presente, que es el resultado. Si quieres conocer el futuro, mira tu presente que es la causa.”
Es decir que si el tiempo pasa de presente a futuro, también podría ir de futuro a pasado.
En cualquier caso lo que se evidencia es que si queremos vivir plenamente el presente y hacer uso de nuestro libre albedrío para crearnos la vida que deseamos, podríamos liberarnos de programas, creencias y prejuicios del pasado.
Tus enfermedades físicas, emocionales y mentales dicen que tienes emociones congeladas en tu pasado que condicionan tu presente y futuro.
Alguien dijo que “no tienes obligación de ser la misma persona que ayer”
Tomas Elorriaga