Desde niños nos vamos construyendo una identidad, un ego. Nos dan un nombre y nos vamos dando una personalidad, una forma de ser…y decimos «yo soy así»
Con el tiempo este ego es como una careta o caparazón. Me ayuda a sobrevivir. Hacemos juicios, vemos peligros, vivimos relaciones y sensaciones de separación… todo desde este ego.
Si me atacan o me siento atacado me protejo o huyo con este caparazón, que a veces me ayuda a no sentir, a no dañarme emocionalmente.
Pero este ego no eres tu realmente. Esta solución del pasado te limita en el presente y no te deja crecer en el futuro. Es un corsé.
Para ser realmente tu debes quitarte la careta, salir del caparazón, abrir tu corazón y exponerte a la vulnerabilidad. Todo frente ti mismo.
Así lo hacen los animales cuando abandonan la seguridad de una piel o se quitan el caparazón para crecer y cuando vuelven a crecer se vuelven a quitar el caparazón en un proceso que se repite de forma cíclica.
Si no te quitas el caparazón, te quedas en el pasado, en una zona conocida pero incomoda con todo el malestar y enfermedades…repitiéndolas.
Trascender es abrirte a ti mismo, dejar tu viejo yo y abrirte a todo lo que puedes llegar a ser
Tu debes abrir tu corazón para ser realmente tu, nosotros te acompañamos en
Tomas Elorriaga
Biólogo
tomas.e@humaning.es